POR: REV. PADRE NIKOLAOS AGORIS – PÁRROCO DE LA ILESIA ORTODOXA GRIEGA
Uno de los textos más admirables del Nuevo Testamento es el espléndido Himno al Amor del Apóstol San Pablo. Contiene asombrosas verdades que iluminan y eleven al ser humano y que le dan admirable e indispensable razón a nuestra vida. El amor es un regalo divino de Dios a la humanidad. Dios revela este Amor enviando a su Hijo, Jesucristo. Sin el amor no podemos vivir ni siquiera para aplicar ninguna otra virtud. El apóstol Pablo dice que aunque el Hombre tenga todas las competencias y capacidades para llevar a cabo grandiosas obras, si no tiene Amor no es absolutamente nada. Solo si la conducta del hombre lleva dentro de sí el Amor de Dios, es carismática y maravillosa. Ese hombre que ama no siente envidia; no se infla de egoísmo; no se llena de ira; no busca sólo su propio interés; no piensa mal de los demás.
Nada destruye el Amor. Siempre reinará y se mantendrá en todo el mundo y llenará los corazones de todos aquellos que lo acepten y apliquen en sus vidas.